miércoles, 24 de noviembre de 2010

UN VIRAJE AL VENEZOLANO

Para nadie es un secreto, porque cada venezolano lo vive en carne propia, que Venezuela está navegando hacia un puerto donde se vislumbra unas condiciones de pobreza bastante significativa con marcadas consecuencias no muy halagadoras. Situación ésta, que resulta una paradoja para un país como el nuestro, con potenciales que no lo tienen muchos países que hoy día se consideran desarrollados.
A  mi manera de entender y visualizar la situación, hay que iniciar un proceso de monitoreo de las coordenadas que han trazados quienes dirigen los destinos de Venezuela y revertir la ruta mirando las coordenadas que marcan las necesidades que tiene el colectivo y que considero como prioritarias las siguientes acciones inmediatas:
En primer lugar, una acción dirigida a todos los ciudadanos y ciudadanas del país en lo referente al crecimiento personal para incrementar su autoestima y orientar un cambio actitudinal para realizar lo que el Prof. Santuosso (1992) a denominado: plan masivo de higiene mental, y que lo he denominado “cambiar el software” usando una terminología de la rama de la informática, porque cada venezolano (a) tiene que responsabilizarse con su vida, volver a sus criterios ancestrales. Si vida depende de él y no de los políticos profesionales de turno. Debe entender que su destino depende de sí mismo y no de los demás.
En segundo lugar, debe comprender que para que pueda empezar a satisfacer en forma monetaria sus necesidades, debe comenzar a trabajar como una hormiguita. Así como han hecho en los países donde nació el Capitalismo. La acumulación del capital fue un proceso cotidiano y empezó como migas y no como muchas veces  se hacer creer, que fue creado por unos grandes aventureros. Aunque hay sus excepciones. El capitalismo fue creado por los millones de artesanos, de comerciantes, de pequeños emprendedores, que acumulaban como hormiguitas, sin despilfarrar, ahorrando, acumulando y así fue naciendo el mercado, que no es más que una comunidad de vendedores y otra comunidad de compradores, y está basada sobre el crédito, la confianza, el respeto por la palabra dada, sobre sólidas reglas morales. La historia ha demostrado, con hechos, que la tercera vía hacia el bienestar social, es el capitalismo humanizado, donde el elemento humano es lo más importante, es lo único que garantiza la sustentabilidad y la sostenibilidad de las organizaciones.
La tercera acción es, fomentar la cultura emprendedora en la gente y ayudarles a identificar necesidades insatisfechas de su comunidad y crear actividades empresariales para satisfacerlas, a través de la creación de unidades de producción a nivel de autoempleo y microempresas (desarrollo endógeno). En este proceso el papel del sector educativo incluyendo todos los niveles: desde primaria hasta universitaria, deben fomentar el emprendedorismo. Para ello, se debe contar con una infraestructura de apoyo al emprender desde la consecución de la idea del negocio hasta que logre su independencia financiera
Conjuntamente con estas acciones, es necesario incorporar a todos los venezolanos, sin distingo de credo, militancia, condición social, al proceso educativo, bajo los criterios que establece la Constitución en cuanto a la calidad, pertinencia social y para la vida. Debo reconocer, en cuanto a este punto, hay espacios bastante adelantado, pero hay que darle un viraje, si se quiere hago alusión a las tres “R”: Revisar, Reconocer y Readecuar. Ese proceso de educación masiva, se debe fundamentar en dos cuestiones elementales: buscar el arraigo del egresado  y formar en habilidades, destrezas y conocimientos al egresado capaz para resolver los múltiples problemas de su comunidad donde ha crecido. Incentivando la creación de empresas desde su casa o domicilio pensando en la gran cantidad de madres solteras, único sostén familiar. Con esta medida le estaríamos dando un paliativo a uno de los grandes problemas de muchos hogares venezolanos, como es el caso de las madres que tienen que trabajar dejando a sus hijos solos en casa.
Estoy seguro que la única forma para que las personas que viven en pobreza crítica puedan ponerse al nivel del resto de la sociedad, que sería el estado ideal en cualquier sociedad, nivelar hacia arriba y no hacia abajo, sería mediante la ejecución de un programa que se podría llamar: viraje hacia el desarrollo económico de Venezuela.
Para romper la espiral de la pobreza se necesita iniciar un proceso de aprendizaje cultural. Aprender y entender lo que Dios, en la sentencia que hizo a Adán y a Eva, dijo: “Con el sudor de tu frente comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra….” (G: 3-19). En consecuencia, Dios está presente en el desarrollo de la humanidad por haber dicho: sean fecundos y dominen la tierra. Hay una bendición de Dios sobre el progreso del hombre, es un plan de Dios.
Aprender también, lo que nos enseña la hormiguita. Lógicamente este proceso para hacer, lo que podríamos llamar al “hombre nuevo” hay que tomar en cuenta al iniciar cualquier proceso de esta naturaleza, al acervo institucional y cultural, representado en las reglas o normas de los sistemas de decisión. Todos los venezolanos y venezolanas tenemos un conjunto de bienes morales y culturales acumulados por tradición o herencia. Conjunto de prácticas, decisiones, creencias y criterios con los que se han venido interpretando y aplicando los tratados entre personas y comunidades y que tienen que ver con tener una propiedad (casa, carro, finca, etc.) ser dueño de un negocio. Esto se refiere al derecho de propiedad, no por la vía de violar los derechos a otro (robo),  sino por la vía de esfuerzo y el trabajo digno. Tener sueños por alcanzar, sin más limitación, que las que él mismo se imponga.
Es oportuno, considerar el resultado de un estudio hecho por varios profesores de la Universidad del Zulia (LUZ) bajo el enfoque de la Planificación Estratégica Situacional (PES) en el sistema económico, social y político venezolano para hacer un análisis situacional de los problemas que afectan al país y definir cuáles eran las políticas más idóneas que el gobierno debía activar para mitigar y eliminar las demandas sociales que más afectaba al colectivo, llegando a la conclusión, una vez que se instrumentó con la matriz de valuación de los problemas por los actores, que el inconveniente que más afecta a los venezolanos es la falta de oportunidades de trabajo (Desempleo) (RVG, año 11, nº 35, 2006, pp. 352-382).
Hacen las siguientes propuestas:
Ø  Fomentar y apoyar a los emprendedores emergentes de negocios.
Ø  Reabrir el proceso de apertura a la inversión privada nacional y extranjera.
Ø  Promover la operativización de los programas de los ejes o polos de desarrollo estratégico.
Ø  Promover  el sistema planteado de Desarrollo endógeno
Además de las anteriores propuestas, agregaría una consideración básica y elemental: restablecer los derechos económicos y ciudadanos garantizados en la Constitución vigente, bajo los principios fundamentales establecidos en la misma. Si queremos cambiar el rumbo hacia el cual viaje el “Barco denominado: la República Bolivariana de Venezuela” debemos tomar en cuenta políticas públicas concertadas; en este orden de idea, entre todos debemos construir un: ARCA para hacerle frente al diluvio de problemáticas que se nos puede venirmy que podríamos evitar:
Actuar con
Respeto
Consideración y
Amor.

El ARCA debe estar construida con los Valores Superiores: la vida, Libertad, Seguridad, Justicia, Igualdad, Solidaridad, Democracia, Responsabilidad Social, Preeminencia de los derechos humanos, la Ética pública, El Pluralismo político

¿SERÁ VERDAD QUE “NUESTRO SOCIALISMO HUMANIZA”?

Desde hace algún tiempo vengo observando un slogan promovida por el gobierno actual a través de distintos medios de comunicación que es necesario, a mi manera de ver las cosas, hacer algunas reflexiones, que nos permita confirmar o negar, a la luz de los hechos, tal aseveración. En consecuencia, comenzaré definiendo algunos términos para aclarar el tema: “nuestro socialismo humaniza”, para luego presentar algunos hechos que pudieran afirmar o negar lo que se pretende demostrar.
¿Cómo lo define el Diccionario de la Real Academia Española (DRAE)? 1. Humanizar: Hacer humano, familiar y afable a alguien o algo. 2. Ablandarse, desenojarse, hacer benigno.
Humano: 1. Perteneciente o relativo al hombre (ser racional). 2. Propio o característico de él. 3. Comprensión, sensible a los infortunios ajenos. 4. Ser humano. 5. Conjunto de todos los hombres, que tiene que ver con los actos, ciencias, derechos, género, letras, linaje, naturales, reza, respeto.
Socialismo: Sistema de organización social y económico basado en la propiedad y administración colectiva o estatal de los medios de producción y en la regulación por el Estado de las actividades económicas y sociales, y la distribución de los bienes. || 2. Movimiento político que intenta establecer, con diversos matices, este sistema. || 3. Teoría filosófica y política del filósofo alemán Karl Marx, que desarrolla y radicaliza los principios del socialismo. Con estas definiciones se podría decir que un gobierno elegido por el Poder Constituyente (el pueblo) debe dedicarse a resolver los problemas para ser de los venezolanos y venezolanas verdaderos seres humanos; muy sensible a la problemática relacionados con la salud, seguridad, educación, servicios públicos, vivienda, vías de comunicación, entre otros y que tome en cuenta a todos, sin distingo de ningún tipo.
¿Los hechos humanizan? ¿Los hechos que han ocurrido representados por las políticas, programas, proyectos y acciones han convertido al venezolano o venezolana más humana, familiar y afable? Veamos algunas violaciones que se han hecho de la Constitución vigente: Los cambios en los principios fundamentales de la organización del Estado, que buscan transformar el Estado democrático descentralizado en un Estado socialista centralizado. Caso de la Alcaldía de Caracas, gobernaciones en manos de otros movimientos diferentes a los de PSUV. Los cambios en el sistema político, que buscan transformar la democracia representativa en una supuesta participación popular conducida por el Poder Central. Caso de la nueva Ley de los Consejos Comunales y Educación. Los cambios en la forma del Estado, que buscan eliminar definitivamente los vestigios de Federación centralizada mediante la centralización total del Estado. Caso del paralelismo de gobierno en Distrito Capital. Los cambios en la organización del Poder Nacional, que buscan acentuar el presidencialismo, evidenciados por la cantidad de funciones que se le han arrebatado a los estados y municipios, olvidándose el derecho de los municipios a ser la Unidad Primaria del Poder Público. Los cambios en la Constitución económica, que buscan transformar un Estado social y promotor de la economía mixta, en un Estado socialista de economía estatal centralizada y confiscatoria, representado por las fincas, terrenos y empresas que han sido confiscadas y sin resultados positivos que justifiquen la acción. Los cambios en los derechos laborales: una “reforma” constitucional inútil planteada y que fue rechazada por el pueblo (Poder Constituyente) que está por encima del Poder Constituido, pero que ahora es rebatada a través de la Ley Orgánica de Educación (LOE) en cuanto al derecho a la sindicalización, celebrar nuevas convenciones y el derecho a la protesta. Los cambios en el régimen de la Fuerza Armada, que buscan transformar el Estado civil en un Estado Militarista, donde el militar se ha convertido en un activista político y al servicio de una parcialidad política.
Las ciudades están cada día menos humanizadas. Las estadísticas y las informaciones a diario por los distintos medios de comunicaciones regionales y nacionales dan cuenta de robos, hurtos y atracos, secuestros, invasiones, desempleo, la inflación, la devaluación, las injusticias, los fraudes bancarios, PDVSA, gobernaciones; la escasez de productos básicos de la dieta de venezolanos (nas), el parque automotor sufriendo las consecuencias de la escasez de repuestos. Los servicios públicos en decadencia: el agua, electricidad, gas, teléfonos, aseo urbano, vías de tránsito terrestre. La educación en picada, es cierto que hoy día la población estudiantil es mayor, es una situación global, hay mayores instituciones educativas, pero en cuanto a la calidad, deja mucho que decir, hoy más que nunca se necesitan profesionales que conozcan el medio, se conozca a sí mismo, conozca los conocimientos y la manera más adecuada para llegar a ellos; implica todo un proceso de aprendizaje autónomo en el que él aprenda a aprender; siendo éste un requisito para la formación por competencias. Entendiéndose como un saber hacer en un contexto dinámico de un sujeto con capacidad de creatividad, adaptación y asimilación de lo nuevo, en situaciones concretas, lo que en última instancia se reduce a “sujeto que idóneamente resuelve algo preciso” (Marín, 2002), ya que son muchos los problemas que tiene el país y que cada día son más graves, lo que implica, parafraseando al Presidente Arias: “algo hicimos mal”. En cuanto a salud, los hospitales están prácticamente fuera de servicios con un sistema de salud paralelo, donde se dividieron los esfuerzos y no resolvieron nada. Tenemos la presencia de enfermedades que se creían erradicadas, aunque se cumplen los planes u operativos de vacunaciones pero parece ser y según opiniones de conocedores de la materia, que estas vacunas no cumplen con los objetivos. El venezolano cada día empeora su sistema de alimentación, convirtiéndose así en una población, en los próximos años, enferma. Ante este panorama, se podría decir que ¿nuestro socialismo humaniza? Ante esta situación muchas personas se han convertido en los “hijos de la esperanza” bajo las promesas de: bolívar fuerte, el socialismo del siglo XXI, el hombre nuevo y con la interpretación errónea de la parábola bíblica de que “ser rico es malo” tal vez para preparar a la sociedad venezolana a un ambiente de escasez y pobreza y no en el ambiente de abundancia que es propio de Dios; y bajo el objetivo de la “Suprema felicidad”, un objetivo inalcanzable en el ámbito terrenal y que sólo Dios lo puede lograr. En cuanto a los valores inculcados en los últimos años y que han sustituidos a los valores tradicionales, tal vez pensando en las premisas: “Si usted cree en lo que siempre ha creído, entonces siempre pensará lo que siempre ha pensado y siempre actuará como siempre ha actuado y siempre obtendrá lo que siempre ha obtenido” (Marilyn Ferguson, “La conspiración de Acuario”) y sin pensar que el éxito de organizaciones consolidadas radica en el poder que sus creencias ejercen sobre su gente y no a su forma de organización ni a las habilidades administrativas, y con ello establecer patrones de comportamientos pocos éticos para la armonía de cualquier país. En consecuencia, hemos observado casos como la doctrina cooperativa y la de los Consejos Comunales, sus valores, sus principios, sus prácticas y su historia, su identidad y su proyecto no han podido sostenerse de algún modo frente a un entorno hostil que promueve los antivalores del egoísmo posesivo, el éxito a cualquier costo, la exaltación de la desigualdad y la meritocracia, por la búsqueda de resultados políticos desenfrenada. Por tanto, los valores se manifiestan por las actitudes, las formas y maneras de ser, la conducta de hacer y el modo de actuar. De allí, la proliferación de las invasiones, una abierta manifestación del no respeto por lo ajeno, un vulgar robo o hurto de la cosa ajena. Tal vez no estamos cayendo en cuenta, que una formación en valores nos permiten de manera individual a: Aprender a hacer, Aprender a aprender, Aprender a emprender, Aprender a convivir y Aprender a cambiar; y de manera colectiva: formar liderazgo, valores compartidos, comunicación fluida, trabajo en equipo y una gran motivación para construcción o edificación. De esta forma estaríamos conformando una sociedad o individuos conformistas, mediocres, facilistas, sin visión de futuro y sin grandeza de ánimo. Pero es necesario buscar el equilibrio de valores ante el mandato de Jesús como es el Amor y cuando administramos o representamos a la Ley. Cuando profesamos Amor somos flexibles, pacientes, tolerantes, amantes de la libertad y sobre todo afable y cuando representamos a la Ley deberíamos ser precisos, determinante, disciplinados, responsables y honestos y estaríamos haciéndole frente a los antivalores individuales de ser negligentes, dejados, sumisos, libertinos e hipócritas y como administradores de la Ley o en colectivo: rígidos, violentos, autocráticos, obsesionados y con una actuación grosera. La actual Constitución es considerada el mejor proyecto de País que hemos tenido en la historia de Venezuela, pero lamentablemente, se ha quedado en letra muerta. Se profesa en nombre de la Constitución pero a la hora de actuar se hace otras cosas que no concuerda con las normas preestablecidas en las reglas de juego acordada por todos los ciudadanos y ciudadanas de esta nación. Entonces cuáles son los intereses que están en juego en estos momentos: ¿Será que nos estamos convirtiendo en más humanos? ¿En más racionales, más libres e independientes? ¿Cuál es la diferencia de estar alienado por un determinado país u otro? ¿Quién nos beneficia más, quién está dentro de la filosofía ganar-ganar? ¿A caso, estamos exento de la Globalización, producimos el 100% de lo que consumimos, podemos decir, que nos valemos por sí mismo? ¿De qué nos ha servido nacer en un país rico en recursos naturales? ¿No será que nos pasa como el granjero con la vaca? ¿No será que la culpa es de la vaca? Cada quien busque y se de las respuestas a cada una de estas interrogantes.

LA UNIVERSIDAD QUE SIEMBRA



“Siempre vemos al césped del frente, mejor que el nuestro”. Pareciera que ante bajas pasiones, sin ética y moral, no deja ver lo bueno de la UNELLEZ, una Universidad anclada en los cuatro Estados Llaneros Occidentales, con tres características resaltantes e importantes, que conforma el Modelo UNELLEZ, y que los profesores fundadores ayudaron a dar los primeros pasos de esta filosofía y que después de unos cuantos años, dicho modelo no cuenta. Las características del modelo que se recoge en los documentos de la exposición de motivo para su fundación son: La Experimentalidad, que no es sólo una nomenclatura o clasificación legal para ubicarla dentro de un grupo, se trata de un “estado de ánimo”, se trata de experimentar nuevas estructuras, nuevos mecanismos, que hagan posible un mejor y más racional uso de los recursos disponibles en sus área de influencia. De esta forma, todo lo que se va desarrollando en la Universidad, desde sus estructuras de organización hasta la metodología del aprendizaje se va poniendo a prueba, calibrando su grado de eficiencia, de allí, es que se trata, más de una actitud que de un status jurídico, porque tanto las autoridades como el resto de la comunidad universitaria son consciente de que no hay nada “hecho”, “establecido”, sino que todo esta sujeto a corrección, a ajustes, a cambios, con la intención de llegar, por las vía más adecuada hasta los objetivos trazados. Es hora de hacer una evaluación a nosotros mismos; ¿qué has aportado a esta idea, has contribuido a que la UNELLEZ cumpla su misión? Y más aún, cuando estamos hablando de transformación.

El Carácter Regional, donde su acción está encaminada a colaborar en el proceso transformación Social, Científico, Económico y Cultural de los Estados: Apure, desarrollo regional; Barinas, desarrollo social; Cojedes, desarrollo agroindustrial y Portuguesa, desarrollo agrícola, con el firme propósito de dedicarse al estudio de problemática particular de la región y evitar la concentración en un determinado centro urbano. Si no lo ha hecho, ¿de quién es la responsabilidad?

Sistema Universitario: Para realizar la tarea del desarrollo nacional a través del impulso del desarrollo regional, se establece un sistema universitario como parte del subsistema de Educación Superior y en estrecha relación con él, la UNELLEZ conforma su propio sistema integrado y coherente, en la región de los Llanos Occidentales, no se trata de una Universidad urbana, que luego se expande a través de núcleos en otras localidades o regiones, se trata, en nuestro caso, de cuatro universidades en una, con sede en las cuatro capitales de estado. De allí, que la actividad de la UNELLEZ se desarrolle a través de cuatro áreas de la actividad humana: Producción Agrícola, Infraestructura y Procesos Industriales, Planificación y Desarrollo Regional y Planificación y Desarrollo Social. Cada una de estas áreas está concentrada para su coordinación en cada una de las capitales del estado, y al mismo tiempo realizan sus actividades en los otros estados. Es por ello que se habla de un sistema universitario, porque las cuatro áreas, en sus labores respectivas, siendo independientes entre si, se integran y planifican a nivel regional; evitando de esta manera, tanto la exagerada centralización como la inútil dispersión de esfuerzos y recursos. Entonces, ¿dónde se expresa la concentración de poder, de la cual se argumenta para justificar la división? Junto a estas tres características, la UNELLEZ, tiene la responsabilidad de estar al servicio de la comunidad que vonviven en los cuatro estados.

Cuando observamos su logotipo, tiene una gran trascendencia, porque se refiere a un Surco, el cual según el DRAE, significa: Hendidura que se hace en la tierra con el arado. Señal o hendidura prolongada que deja una cosa que pasa sobre otra, conjuntamente con su Slogan: “La Universidad que Siembra”. ¿De quién es la culpa por no haberse materializado el logotipo y el slogan?

Si hacemos la analogía, la UNELLEZ tiene como misión la siembra de valores, destrezas, habilidades, conocimientos en el recurso humano que ha formado desde sus inicios. Dejarle la huella en aquellos que han pasado por sus instalaciones en su proceso de formación. En consecuencia, la forma de construir la estructura de objetivos menores comienza con el establecimiento de una pregunta elemental: ¿qué queremos? ¿Cuál es la Universidad que queremos para dentro de cinco, diez años?

Puede parecer paradójico, puede resultar absurdo o se puede caer, incluso, en el riesgo de lo ridículo, pero no por ello puede eludirse ésta realidad: ¡Muchas organizaciones no saben exactamente lo que quieren! Por lo menos, ha sido la demostración que hemos visto en estos once años que ha tenido el proceso de intervención que se ha ejecutado sobre la UNELLEZ. Han tenido enormes dificultades para plantear elocuentemente sus deseos, sus expectativas. En muchos casos el planteamiento de ellos transita una ruta periférica, no se dirige de manera específica a la órbita de los intereses de la Misión, de la razón de Ser de la Universidad. En otros casos se sujeta a una mecánica repetitiva y demasiado elemental: la universidad del pueblo soberano, la municipalización de la universidad, participación del pueblo, masificación de la educación, la no exclusión, etc. Todos estos son por supuesto objetivos (de tipo numérico) de corto plazo en función de la categoría y de la trascendencia que tiene las políticas del actual partido de gobierno.

En algunos casos la situación es aún peor, porque las autoridades intervensionistas ni siquiera conocen adecuadamente la filosofía de la UNELLEZ. No puede deberse a otra cosa el hecho que muchos procesos tradicionales de intervención se inicien con el planteamiento de la pregunta ¿qué debemos hacer para tener mayor cuota de poder y ganar adeptos? Como un esfuerzo destinado a tratar de definir la “misión” de intereses particulares y no del colectivo stakeholders. Es sólo cuestión de imaginarse tamaño despropósito: si una Institución debe hacer esfuerzos metodológicos para definir su razón de Ser, resta esperar muy poco respecto a sus deseos y expectativas para el futuro.

La construcción de lo objetivos menores que soporten la Misión organizacional (que no es otra cosa que la razón de ser de la Institución), comienza necesariamente por responder la pregunta ¿qué queremos? Y esta pregunta debe responderse con lógica trascendente, es decir en términos de un futuro que exceda, incluso, la permanencia natural promedio de la gente que forma la Institución. Los horizontes del tiempo de vida de una Institución y más cuando se trata de una Universidad, son por naturaleza mayores a las de cualquier persona que circunstancialmente forma parte de ella. Y es necesario explorar estos horizontes de tiempo el momento de responder la pregunta.

Una prueba evidente de la pertinencia de esta demanda se encuentra en algunas de las grandes organizaciones del mundo cuyo estado actual (más allá de las coyunturas), es un producto de la Visión trascendente de hombres grandes que le dieron forma y destino. Hombres como Ford, Edison, Graham Bell, Sloan, etc., respondieron la pregunta ¿qué queremos? en un horizonte de tiempo que excedía el de sus propias vidas, y de esta manera definieron el carácter de sus organizaciones durante décadas. Marcaron el rumbo, tendieron el surco y de allí para adelante facilitaron la sucesiva construcción de objetivos menores.
Organizaciones como estas son definitivamente una excepción en el mundo de los negocios, pero que muy bien puede servirnos como ejemplo para el caso universitario, porque el resto de las millones que existen transitan el “anonimato trascendente”, viven la coyuntura, entre pequeños éxitos y pequeños fracasos.

La Visión de una institución no tiene horizontes de tiempo definidos. Es una respuesta trascendente a la pregunta ¿qué queremos? Se proyecta en el tiempo, diseñando en el futuro la Institución que se quiere ser y la Universidad que habrá de soportarla.

La Visión de una Universidad es patrimonio de hombres, no de la Organización o de un partido político o un determinado gobierno (“los hombres pasan y las organizaciones quedan”) y es definitivamente patrimonio de Hombres Grandes, que tienen además la habilidad suficiente de dejar esta Visión en herencia a los que les suceden, consiguiendo con ello que constituya una Visión que no se separa del destino de la Universidad mucho tiempo después que ellos mismos han desaparecido. Este es el caso del Dr. Felipe Gómez Alvarez y de quienes lo acompañaron y tan loable trabajo de construir los comientos de la Universidad que Siembra. Esta Visión de la Universidad no tiene nada que ver con la Visión que habitualmente se plantea en los procesos de intervención, que se reflejan en su planificación, la cual tiene carácter instrumental, se encuentra ubicada por debajo de aquella, apenas encima de los objetivos operativos.


La Visión de la UNELLEZ ha de ser aquella de los Ford, los Edison, los Sloan: una imagen trascendente del futuro, del carácter, del valor, del tamaño, de la importancia y del significado que la Universidad tendrá. Es una Visión Capital, un llamado a la “tierra prometida”, ÉSA Organización tipo que los trabajadores japoneses le quieren dejar a sus hijos.

Por tanto, en vez de pensar eliminar a la UNELLEZ para convertirla en cuatro universidades diferentesa, debemos pensar que la Visión de la Universidad debe echar raíces dentro de su seno hasta convertirse en un Rasgo de Identidad, como producto de haber sido anunciada y planteada por las energías constituyentes y de haber sido incorporada en el “sentir” mismo de las energías constituidas. Las personas deben sentir que forman parte de un Proyecto que tiende cuerdas desde el futuro, mas que de una institución que se desenvuelve entre la pequeñeces del presente y del corto plazo.

En consecuencia, hago una invitación, construir la Visión de la UNELLEZ que no tenga límites en cuanto a su forma. Debe ser por esencia grandiosa, llena de promesas, plena en todas sus ofertas. Por muy curioso que parezca, la naturaleza misma del hombre exige la existencia de algo como esto. No existe hombre sobre la tierra exento del poder que una Visión grandiosa y llena de promesas otorga. No existe tampoco hombre alguno que no se plantee, aun cuando sea en lo más profundo de la intimidad, un futuro de esta naturaleza. La Universidad únicamente proyecta esta necesidad natural del hombre hacia sus intereses colectivos.

LA PLUSVALÍA DE LA UNELLEZ

Todo proceso de fusión o conversión es traumático, más aún, cuando los grupos de personas que forman parte de una organización son diferentes a otra, aunque sean de la misma índole. Recordando las sabias palabras bíblicas: “Nadie remienda un vestido viejo con un pedazo de género nuevo; porque la tela nueva encoge: tira la tela vieja, y se hace más grande la rotura. Y nadie echa vino nuevo en vasijas viejas; porque el vino la rompería. Así se echarían a perder el vino y las vasijas. ¡El vino nuevo, en vasijas nuevas! (Marco, 2,21-22). Cuando nos ponemos hacer comparaciones entre dos formas de educación formal: caso Unellez y Misión Sucre, que hoy día se le ha denominada Municipalizada y ahora la pretensión de incluirla en la “Misión Alma Mater” nos encontramos con tres mundos diferentes, cuyos propósitos no se deben conjugar. Nos encontramos con tres visiones totalmente distintas, que a la larga, la Municipalizada o la “Misión Alma Mater” terminará con el Modelo Unellez, que a mi juicio, siempre he comentado, su modelo fue pensada para este Siglo, y que lamentablemente, quienes han tenido la responsabilidad de dirigir los destinos de la misma, no han sabido conducirla a puerto firme; y por otro lado, quienes han tenido la oportunidad para convertirla en la institución de la educación superior de primera, más bien han contribuida a destruirla y llevarla a menos, aún cuando se vocifera a los cuatro vientos el nombre de Ezequiel Zamora, en consecuencia, he analizado la situación, en cuanto a fusionar la Municipalizada con la UNELLEZ Sede, o a la desintegración, no beneficiará en ningún sentido a la misma. Al contrario significará la muerte repentina de esta casa de estudio (las dificultades serán mayores), de acabar con la plusvalía que ha acumulado desde su creación; y por el otro lado, la frustración de quienes se sometan a las nuevas reglas de juego, por cuanto sus expectativas, van a ser cambiadas ante las nuevas condiciones. Mi punto de vista, está fundamentado por las razones siguientes: La modalidad de estudio, capacidad de respuesta y el tipo de estudiante. Por ejemplo: La Municipalizada nace bajo el esquema de la educación formal en masa, se cumplirá uno de los principios de Peter; colapsará por el tamaño y se impone otros valores, desconociéndose las bondades del objetivo al logro. La UNELLEZ nació como instrumento de desarrollo de los llanos occidentales bajo sus cuatro enfoques: Planificación y Desarrollo Social, Planificación y Desarrollo Regional. Infraestructura y Procesos Industriales y Producción Agrícola, cuyos enfoques son: al elemento humano, al espacio territorial, infraestructura y procesos y lo agrícola. Esta Universidad lo que necesita es empujarla hacia la consecución de sus verdaderos objetivos en vez, de disminuirla o fraccionarla sólo con un propósito personalista y egoísta a fin de lograr más poder y control. La Municipalizada y la Misión Alma Mater deben ser creadas bajo sus propios estilos según la visión y propósito de su mentor y no mezclarla con una organización que tiene en sus haberes 32 años, ni muchos menos pretender eliminarla a partir de una nueva creación. Su Plusvalía se fundamenta en el capital social conformado a lo largo de estos años, de quienes tenemos sentido de pertenencia y nos sentimos orgullosos de pertenecer a esta casa de estudio y quienes soñamos verla convertida en una Universidad competitiva a la par de cualquier de las mejores universidades del mundo y que sea copartícipe del desarrollo de la región donde se encuentra anclada y en general con el país.

EL CONSEJO COMUNAL COMO ALTERNATIVA PARA EL DESARROLLO MICRO LOCAL

Con este artículo pretendo hacer una aproximación teórica para proporcionar algunas ideas de desarrollo a nivel micro local desde los consejos comunales y resaltar la importancia que las leyes les asignan a los mimos y la suma de recursos financieros destinados para ser ejecutados por estos.
Se persigue además, resaltar las exigencias de la normativa legal en cuanto a que los ciudadanos y ciudadanas estén atentos y participen en la constitución y dirección de los consejos comunales y en especial a los profesionales universitarios. Así como también, el ejercicio de las facultades de la Control Social de los consejos comunales como herramienta de control para el ejercicio de la democracia participativa y protagónica.
Es bueno recordar que en la década de los 60´s comenzaron en nuestro país los movimientos vecinales como una forma de hacerle frente a los distintos problemas de las comunidades, pero lamentablemente la apatía de alcaldes y alcaldesas, no entendieron la oportunidad que tenían estos movimientos, a pesar que tenían la normativa legal establecida por el Código Civil, y por otro lado se le consideraba con una plataforma jurídica débil como para atender necesidades comunales.
Los municipios no ejercieron el preponderante papel que la Constitución les asignaba, como lo era el ser: “... La unidad política primaria de la organización nacional”. Una vez que se aprobara la plataforma jurídica, que más tarde normalizara las asociaciones vecinales, estas no se nutrieron de los recursos financieros previstos en la ley. Estas instituciones no escaparon de las influencias politiqueras a que han sido sometidas la mayoría de nuestras instituciones en perjuicio de su razón de ser, por lo consiguiente fueron objeto de los intentos políticos partidistas, que mataron la nutriente de todo movimiento social, como es la pluralidad. Por otro lado, la inercia y pasividad de muchos vecinos, quienes no entendieron la importancia y significación de este movimiento, se mantuvieron al margen de ellos. El huracán político con que se ha implantado, la participación ciudadana, a través de los consejos comunales, terminó con este movimiento, desde el punto de vista de su constitución o formación. Aunque aún permanece la figura de las organizaciones vecinales en el marco legal, la importancia que le ha dado el gobierno actual a los consejos comunales, se ha minimizado su importancia.
¿Porqué los consejos comunales? En la conformación de los consejos comunales, desde la óptica del “deber ser”, presentan dos dimensiones muy bien definidas: una dimensión socioeconómica y una sociopolítica. Donde la primera dimensión establece como objetivo global la de solventar los requerimientos de las pequeñas comunidades y la segunda, establece al consejo comunal como una aproximación audaz, útil y oportuna para experimentar el ejercicio de la democracia directa. Cuya función sería la de reunir el conjunto de aspiraciones, capacidades y necesidades que luego se materialicen en objetivos de corto, mediano y largo plazo de cada comunidad y que estarían representados en los planes de desarrollo económico de la localidad de acuerdo a los establecido en el artículo 20 de la Ley de los Consejos Comunales (LCC).
¿Es una oportunidad o reto para los consejos comunales? Los consejos comunales se debe considerar como la oportunidad para revitalizar los Concejos Municipales y hacer valer lo que se establece en nuestra Carta Magna: “… es la unidad política primaria de la organización nacional, gozan de personalidad jurídica y autonomía dentro de los límites de esta constitución y la ley”. Por tanto, los municipios se podrían convertir en las estrellas que alumbren el desarrollo integral de Venezuela y también, para que las pequeñas comunidades se fortalezcan y demanden su preponderancia, como el naciente nuevo poder más cercano a los ciudadanos. A su vez, estaríamos potenciando la participación, el protagonismo y el autogobierno comunitario, porque los consejos comunales son en esencia un micro gobierno local.
¿Todo dependerá de la manera como se instauren? Claro que sí. Deben nacer como: Entes institucionales, como agentes multiplicadores de desarrollo, apegados al manejo de la diversidad, dentro del pluralismo político, como garantes de los principios fundamentales, dentro de los derechos humanos y dentro de las garantías señaladas en la CRBV. En consecuencia, no se debe permitir, bajo ningún concepto o pretexto, ser convocados u organizados, ni que operen como apéndices partidistas, que pierda su autonomía, ni mucho menos, que estén subordinados a los órganos centrales de poder, porque estaríamos matando la democracia.
Sería importante acatar lo expresado por el Ciudadano Presidente (15/01/2006), en su programa “Aló Presidente” “… No se trata de la agrupación de los partidos en el barrio. ¡No ¡eso sería matar de una vez esto antes de que nazca el proyecto ¡ no se trata de competencia entre partidos o que el alcalde (sa) diga: “ yo quiero que estén ahí solo los que están conmigo, los que me apoyan a mí de manera irrestricta, incondicional” ¡No¡ Si en alguna parte ustedes ven eso, denúncialo con nombre y apellido ante el país, yo me convertiría en el primer denunciador por aquí, por Aló Presidente, y el primero en evitar que eso ocurra
¿Estaríamos en presencia de Concejos Vs. Consejos? No. Ambos deben luchar desde sus respectivos campos de acción para solucionar los problemas comunitarios de manera mancomunada y en equipo con los roles muy bien definidos: los consejos comunales produciendo la data básica, la información necesaria para establecer los requerimientos de las comunidades con enfoque de desarrollo local de manera integral que propenda la calidad de vida de manera sostenible. Los concejos municipales como un ente integrador y que con esa simbiosis se origina los proyectos de desarrollo locales o mejor dicho, el Plan de Desarrollo Municipal (PDM).
¿Cuál debería ser al apoyo de los concejos municipales? El apoyo estaría fundamentalmente en el elemento humano, como es el de proveer de apoyo técnico con recurso humano cualificado, siendo una de las limitantes de las cuales padecen los consejos comunales. Por lo tanto, es prioritario para los concejos municipales, cumplir su rol en cuanto a la materialización de la democracia participativa directa y protagónica del pueblo, desde las comunidades. Igualmente, es necesario la participación activa de la sociedad del conocimiento, representada por las universidades que hacen vida en la localidad, para crear un ambiente donde se apliquen la normativa jurídica, metodologías y técnicas pertinentes para la formación de un nuevo liderazgo comunitario.
¿Cuál es el objeto global de los consejos comunales? No nacen para sólo dar satisfacción a las necesidades de una comunidad. Tienen como misión alcanzar el desarrollo integral de su comunidad de manera permanente. Desde el ámbito legal, el objeto global del desarrollo integral irá de la mano con la CRBV, porque es en ella, donde se condensan las aspiraciones de los venezolanos. Este es un objetivo permanente, de por vida. El Desarrollo Integral de la comunidad está sustentado por el Preámbulo constitucional, los principios fundamentales y demás normas de la constitución vigente y que propendan al logro de un mejor nivel y calidad de vida de la comunidad.
¿Quiénes tienen la titularidad de este objetivo global? Todos quienes habiten en el territorio del consejo comunal, tomando en cuenta lo establecido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos: “Toda persona tiene deberes respecto a la comunidad, puesto que sólo en ella puede desarrollar libre y plenamente su personalidad” es el medio donde ha crecido y a él se debe su forma de ser, pensar y actuar.
¿Cuáles son los objetivos generales de un consejo comunal? Son los aspectos que conforman el desarrollo integral, los cuales tienen carácter de permanencia en el tiempo y están constituidos por doce (12) grandes sectores, y que resumen las actividades comunitarias. Dichos sectores son: 1. Social, 2 Educación, 3 Promoción, 4 Planificación Integral. 5 Políticas, 6 normativo, 7 Administrativo, 8 Economía y Finanzas, 9 Comercio y Producción, 10 Infraestructura y Mantenimiento, 11 Ecológico y 12 Salud. Esto significa que estos serían las áreas de los comités de trabajo que se deberían conformar en cada consejo comunal y que constituyen el Órgano Ejecutivo (OE), cuyos voceros o voceras deben ser elegidos o elegidas por la asamblea de ciudadanos y ciudadanas con vocación para cada área de trabajo, es decir, con perfil apropiado para ejercer las funciones pertinentes a cada área o sector. Los 12 sectores están interrelacionados. Ninguno puede desarrollarse automáticamente. Cada sector influye en los otros. Debe funcionar al igual como el baile del tejido de las cintas, conocido como el Sebucán.
¿Cuáles serían los objetivos específicos y metas? En un tercer nivel están los objetivos específicos que tienen la particularidad de no ser permanentes, sino que se van alcanzando en la medida que son planteados por los consejos comunales y que suponen un trabajo previo de priorizarlos por decisión de todos cuantos habitan en el territorio de manera consensuada.
En conclusión, un Consejo Comunal debe tener como objetivo global el desarrollo integral, como objetivo general de un comité de trabajo, por ejemplo: infraestructura y mantenimiento (Sector 10), sería: todo lo relacionado con infraestructuras y mantenimiento del soporte físico de la comunidad y que tiene que ver con los comités de tierra urbana o rural, comité de Vivienda y Hábitat, Mesa Técnica de Energía y Gas y Comités de Servicios; como objetivo específico que son todos aquellos que se generan para cada espacio geográfico donde se constituya el consejo comunal. Su vigencia estaría sujeta al cumplimiento del objetivo respetivo. Ejemplo: Construcción de aceras, brocales y refacción de las viviendas, y lo que se planifica hacer, expresados en metros cuadrados, serían las metas.
¿Cuál sería la estructura organizativa de un Consejo Comunal, constituido bajo el enfoque de desarrollo micro local? Es necesario establecer una estructura cónsona con la realidad de cada comunidad, partiendo de las necesidades detectadas por el “Diagnóstico Participativo” elemento fundamental (base de datos) para la planificación del desarrollo de las comunidades. De allí, es que deber ser elaborado con el rigor necesario, con enfoque integral, y que debe contar con la participación de expertos en la materia. El siguiente organigrama sería el más indicado para un consejo comunal con enfoque de desarrollo local.
Esta estructura organizativa está adecuada a la normativa vigente, sólo que el Comité u Órgano Ejecutivo (OE) estaría conformado por doce (12) comités de trabajo, en una segunda instancia; y en una primera instancia, una estructura integrada por tres personas, cuyas funciones estarían relacionados con la administración, de forma general, del Consejo Comunal: Un Coordinador General (CG) nombrado dentro del Órgano Ejecutivo; un Tesorero de la Unidad de Gestión Financiera (UGF) y un Secretario nombrado de la Unidad de Contraloría Social (UCS). Estas tres personas serían los representantes del Consejo Comunal ante todas las instancias externas.
Ante estas reflexiones, entonces ¿qué es el consejo comunal? Es el eslabón primario de la planificación de las políticas públicas. El Plan de la Nación debería estar conformado por la suma de los planes de desarrollo de todas las localidades de Venezuela, como un gran “Plan Maestro” de acuerdo con lo pautado por la Ley de los Consejos Estadales de Planificación y Coordinación de Políticas Públicas. Los Consejos Comunales se convierten en la plataforma humana para alcanzar el mayor grado de participación, protagonismo y gerencia comunitaria dentro de un ámbito geográfico cuidadosamente delimitado, y sirve para diseñar, realizar, controlar y evaluar la calificación final de proyectos sociales destinados a solucionar problemas de salud, educación, trabajo, deportes, medio ambiente, habitacionales, producción y comercio, etc. de la comunidad. Y que no sea visto, como hasta ahora, ha sido la práctica, únicamente para la construcción de aceras, acueductos, canchas deportivas, brocales y no en función de un desarrollo integral para los habitantes de la comunidad, que se preocupe por la generación de empleos, que estimule al ahorro, crecimiento personal para la conformación de un capital social, piso fundamental para que los consejos comunales sean sustentables y sostenidos. Sirvan, además, como centro de información, producción y promoción de procesos participativos y para la identificación de problemas comunitarios. Promuevan los principios de corresponsabilidad, protagonismo y participación ciudadana en la gestión pública comunitaria, para hacer de los vecinos, verdaderos ciudadanos.
En consecuencia, un Consejo Comunal es la autoridad permanente en la Comunidad, ante la cual se debe plantear y derivar todos los problemas de índole colectivo. Es el interlocutor entre la comunidad y cualquier instancia de Gobierno Estadal o Nacional. Vivifica y sostiene nuestra identidad, nuestro patrimonio y pone a la luz todas nuestras fortalezas, capacidad productiva, fuerza profesional, etc. al servicio del país. Rompe con el aislamiento geográfico, social, económico y político que aún nos hace desconocidos dentro de nuestro propio Municipio.
Nos hace sentir que estamos asumiendo juntos el control de nuestras vidas como ciudadanos; que no estamos solos sino juntos y organizados, cuidándonos unos a otros; que los que gobiernan somos nosotros y, que a partir de ahora, asumimos el poder para decidir hacia dónde queremos ir.

ADMINISTRANDO LA POBREZA: TENEMOS DOS TIPOS DE VENEZOLANOS (AS)

En Venezuela hay dos tipos de venezolanos (as). Unos (as) a quienes se les niega el derecho y las oportunidades y asume esta situación como una realidad, sin cuestionarla. Se resigna y hasta cree que es castigo de Dios. El otro (a) el que sabe que tienen el derecho y las oportunidades. Son diferencias esenciales de triángulos, de procesos, de autoestima, de manera de ser, sentir y pensar que crean la dualidad, las paradojas, la no ecología, la no conciencia, lo sistémico en carne viva, porque hay venezolanos (as) encerrados en su negación de crecer y hay venezolanos (as) creyendo en el derecho de ser, poder y tener.

Los actores de los distintos gobiernos, que hemos tenido en los distintos niveles: locales, regionales y nacionales han tratado de capitalizar la manera de sentir de los venezolanos (as) pero ni tan siquiera lo han logrado de sus propios partidarios. Siempre ha habido dos países, el que gobierna y le saca provecho al gobierno y el otro país, el indiferente, el que está a la expectativa, padece y critica a cuanto sucede, pero las contradicciones se hacen evidentes: teniendo democracia, el pueblo no se siente representado, teniendo necesidades no se les satisface, teniendo derechos se les colma de beneficencia. Lo que existe es un inteligente juego político, compuesto de mil enredadas formas de poder, donde los autores se las ingenian para que aquí no pase nada.

El vandalismo, la invasión, la expoliación, la destrucción, son las expresiones más frecuentes de nuestra marginalidad. El marginal incendia bosques; invade propiedades levantadas con esfuerzo y sacrificio; destroza árboles; ensucia calles; destruye obras de arte; daña los teléfonos públicos, las paradas de autobuses, las alcantarillas; roba los cables, los equipos médicos; arremete con violencia contra lo que es de todos. Una evidencia de que no hay conciencia de espacio y tiempo, no hay conciencia de límite, no se tiene claro dónde terminan nuestros derechos y dónde comienzan los derechos de los demás.

Cuántas acciones han hecho los gobiernos que se convierten en acciones de administrar la pobreza: cuando el estado asume su papel paternalista y el venezolano ve al Estado como el proveedor de alimento, vivienda, trabajo, vestido. Cómo se puede otorgar el poder al pueblo sino se toma en cuenta su contexto.

Otro elemento importante, mencionado anteriormente, son los mapas mentales, que no es más que lo aprendido. Lo que define las normas, valores y comportamientos. Somos imagen y semejanza del medio ambiente donde hemos crecido. El medio nos hace “pantalleros”, a usar el amiguismo-compadrazgo para alcanzar nuestras metas personales. Somos copiones por naturaleza, muchas veces lo que somos es porque lo hemos copiado de nuestros padres, amigos, de la TV. Nos gusta el facilismo, vivimos al día, “como vaya viniendo, vamos dando”.

Venezuela ha sido comandada por la partidocracia, el cogollismo. Andamos como las iguanas: de cogollo en cogollo. Quienes acceden al poder, cambian su identidad, pasan a ser primero del partido y luego ser venezolano, ya que ser del partido de gobierno, da status, poder, permite viajar, tener acceso y disponer de un pueblo a su antojo para repetirle a cada momento la lista de promesas y programas que nunca han cumplido.

Otro flagelo, es la corrupción, que pasa a ser un mapa, porque viene de la no conciencia de límites entre lo individual y lo social. El venezolano lo aprende en el medio por ausencia de modelos. Ha visto en ella, una forma de sobrevivencia cómoda útil y aceptada, materializada por la impunidad de los delitos, pareciera que la honradez es criticada y al corrupto es alabado, es propia de la persona “vivaracha” que luce costoso vehículos.

Somos individualistas, pensamos en sí mismo para olvidarnos del otro, nos dificulta vernos como parte de un sistema, donde todos somos importante, donde el bienestar y la calidad de vida para todos depende de la conciencia que todos tengamos del bien común. Consideramos que existe un problema, cuando dicho problema nos afecta directamente, entonces reaccionamos. Todos manifestamos que queremos a nuestro país, que somos nacionalista, pero sólo un porcentaje muy mínimo, dejamos nuestras comodidades para tratar de arreglar la situación que nos afectan, el resto espera que la solución venga del cielo.

Los políticos han tratado de vendernos “modas de hacer políticas”, como la academia lo han hecho en lo referente a “modas gerenciales” para la conducción de una organización, sin tomar en cuenta el contexto donde se pueda aplicar. Hasta el punto que nos han querido “inyectar” un nacionalismo, valiéndose de hechos pasados: recordando que nuestros indígenas eran fuerte y laboriosos, que nuestros soldados eran valientes, tal como lo señala el Prof. Barroso (1991) que “ ..El político alimenta su discurso con el pasado ajeno que no nos pertenece, porque no lo hicimos nosotros, tapando nuestros vacíos e incompetencia, produce más bien el efecto contrario: rechazo y adversión. Si lo que vemos es despilfarro, gastos inútiles, la inseguridad en aumento. Cuando hablamos de Patria, estamos hablando de cuidado y servicio, respeto y atención para todos, en todas las áreas. Patria es bienestar común: salud, educación de calidad, trabajo sustentable, vivienda digna, seguridad personal y no discurso de lo que no hemos cultivado”.

Ante estas reflexiones, es necesario preguntarnos: ¿No será que los gobernantes les interesa más, administrar la pobreza? ¿Qué pasaría con los políticos, si tenemos una Venezuela productiva, donde cada uno es capaz de resolver su problema de sobre vivencia y crecimiento personal?¿Qué pasaría si a los venezolanos se le inculca valores de solidaridad, de honestidad, responsabilidad, la alternativa de Rodríguez o la de Gallegos: educar al venezolano a ser persona, a sentirse digno y con derechos, a ser miembro de una familia, una comunidad, una organización donde lo esencial es la persona quienquiera que sea, importante y donde exista oportunidades para todos.